La desesperación de un padre por obtener su reserva fue así: intenta nuevamente por teléfono durante esta mañana y nuevamente le comunicaron que no era posible. Sin rendirse, pues firme en su posición quería tener su reserva, decidió ir a las 11.30am a hacer la reserva personalmente. Para su sorpresa cuando llegó al restaurante habían personas que estaban llegando para separar sus mesas ¡¡increible!!, entonces decidió quedarse.
Llamadas que venían e iban, hizo que adelantaramos el almuerzo y le dimos el encuentro a las 12m en el restaurante. Encontré a mi progenitor tomando su gaseosa tranquilo y sonriendo. No era el único que había pensado en hacer eso. Habían otras personas, pero me llamó la atención un señor que había llevado su períodico dominical para entretenerse, mientras esperaba que cuarenta minutos después su familia se le uniera.
Que puedo decir que disfrutamos un rico almuerzo y tres horas después pudieras retirarnos tranquilos dando la posta a los demás que estaban esperando en la calle para entrar. ¡Adiós y buen provecho! ... perdon, Feliz dia del Padre!